El posible avistamiento –aún sin confirmar—de un unicornio en la meseta del Decán, podría demostrar que todavía existen estos animales, echando por tierra los estudios que demostraban su extinción durante el Renacimiento.
Bartolo Catelli, investigador del Instituto de Zoología de Florencia, nos explicó en una entrevista exclusiva:
“De acuerdo a los registros históricos, el último unicornio que se había visto con vida formaba parte de la colección privada de Lorenzo de Medici, quien lo tenía en un establo privado”.
De acuerdo a Catelli, ese unicornio murió en 1493. “Un año antes había muerto Lorenzo, y se piensa que al unicornio le entró una gran melancolía, o de plano el hijo del famoso mecenas no lo cuidó bien”.
Después de ese suceso se le había dado por extinguido. “Sin embargo, este avistamiento, podría confirmar que no fue así”, añadió.
Los unicornios fueron cazados de forma excesiva durante la Edad Media y Renacimiento. Sus cuernos eran usados para hacer copas, pues se decía que neutralizaban el veneno que se pusiera en ellas. Y también hacían dagas, pues se decía que el filo de las mismas era muy venenoso.
“En esta época, en la que estamos perdiendo especies cada día, y de manera tan abundante, el volver a encontrar un animal como éste nos da esperanzas. Ahora sólo nos queda tener fe en encontrarnos también con un pegaso y un kraken”, concluyó.