Después del grave sismo que causó enormes daños en México el pasado 19 de septiembre, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se comunicó con su homólogo mexicano, Enrique Peña Nieto, mostrándole sus condolencias y reiterándole que cuenta con todo el apoyo moral del pueblo de los Estados Unidos.
Aunque el presidente Peña tuvo el tacto de no preguntar el motivo de su tardanza, fue el mismo Trump quien, tras de la plática de rigor, le explicó por qué se dieron las cosas de ese modo.
«Traté de hablar desde hace mucho, pero me di cuenta que mi celular se había quedado sin batería, y para colmo no recordaba dónde puse el cargador. Y en serio, hasta pensé en hablarte desde el teléfono de la oficina oval, pero como tenía el número guardado en la memoria del celular, pues ni cómo llamarte. Fue hasta hoy en la mañana que di con el cargador».
Trump se despidió realmente después de un par de minutos, pues aseguró que «estoy por entrar a un túnel, y ya sabes, se corta la comunicación». Aunque aseguró que llamaría de nuevo en cuando pudiera ponerle unos dos dólares de crédito.