La fuerte tensión que existía dentro de la UNAM parece ser que llegará a su fin. La solución resultó de lo más sencilla: Conociendo los nombres y páginas de Facebook de cada uno de los Porros, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador los contactó y les hizo saber que habían sido perdonados. Los resultados no se hicieron esperar.
Aquiles Baeza Madrina, uno de los que participaron en las agresiones, se presentó ese mismo día en la Facultad de Filosofía y Letras, donde regularizó todas sus materias en menos de 24 horas. De acuerdo a lo que se ha podido observar, es muy probable que termine la carrera en Lenguas Muertas en un plazo no mayor a tres semanas.
Máximo Gandalla, otro de los involucrados, inició el día de ayer un grupo de ayuda a la comunidad, que reunió en una sola tarde 140 toneladas de alimentos para comunidades necesitadas en todo el país; mientras que Zoila Partida de Madre liderea un grupo de investigación que espera encontrar la cura del cáncer para fin de años.
«Para todos nosotros, el perdón fue algo muy importante, y estamos tratando de mostrar que realmente estamos arrepentidos y que estamos tratando de corregir nuestro mal comportamiento. Esperamos que la sociedad nos acepte y reciba positivamente este cambio de actitud”, declaró uno de los ex-porros, que prefirió mantenerse anónimo.
Impartirá la UNAM la maestría en Filosofía de Ricardo Arjona