La titular de la Secretaría del Trabajo y Fomento al Empleo de la Ciudad de México, la doctora Soledad Aragón Martínez, anunció que a partir de la próxima semana, cualquier persona que muera durante su horario laboral, sin importar las causas, podrá ser despedido de inmediato de su trabajo, sin necesidad de una liquidación.
A pesar de la severidad de esta nueva medida, la doctora Aragón dijo que habrá forma de evitar problemas laborales: «De ser posible, trate de fallecer fuera de horas de trabajo. Si siente así como que se podría morir durante el día, es mejor faltar, pues así será más fácil justificar la situación”.
Además, se recomienda encarecidamente informar del deceso con unas tres semanas de anticipación, lo cual permitirá que el patrón tome todas las medidas pertinentes.
Aunque la medida suena algo extrema, la secretaria afirmó que es justa y necesaria: «El fallecimiento es una decisión muy extrema, y usar los tiempos laborales para algo así únicamente demuestra una enorme falta de compromiso que no puede ni debe ser pasada por alto”, concluyó.
Morirse en horas laborales tendrá un peso tal dentro del historial del empleado, que podría provocar no volver a trabajar en ningún otro lugar.
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