Una joven universitaria, cuyo nombre no se ha dado a conocer por razones obvias, demandó a un joven con quien tuvo una sesión de cibersexo hace dos meses, asegurando que a resultas de ello, ha quedado embarazada.
«Yo le insistí durante toda la sesión que debía de ponerse un condón, que yo no me estaba cuidando. Pero él insistió con el argumento de que era virtual, que no podía pasar nada, y ya ven, ahora se niega a responsabilizarse».
El joven, de quien sabemos que se llama Ponciano Hermenegildo Pérez, sostiene que «Todos sabemos que en el sexo virtual no puede haber embarazo, así que sólo me está queriendo colgar el milagrito».
Sin embargo, Chito Contreras, un amigo de la víctima asegura que, con la nueva tecnología, es posible: «Esta mujer y yo hemos pasado noches enteras en mi casa, probando diversos programas, y es un hecho que es posible. Ahora, este hombre debe de responsabilizarse por lo que hice… Perdón, por lo que hizo».
La chica, por otro lado, se niega a hacer la prueba del ADN, pues asegura que eso puede trucarse en la red. «A fin de cuentas, tengo la dirección IPN, que es una prueba más que suficiente. No hay duda, llevo las de ganar, y no hay forma que ese desobligado se escape.»