El doctor Hugo López Gatell sorprendió a la comunidad internacional, y al mismo tiempo provoca casi un infarto masivo, al anunciar que debe prohibirse la venta de pan de muerto por cuestiones de salud.
Si bien ya anteriormente la producción de pan de muerto había sufrido un serio descalabro, en esta ocasión parece ser un golpe del que no podrá superarse, pues será una medida general.
“Esta decisión de trascendental importancia para el país”, dijo López Gatell. «Pocas personas parecen darse cuenta de que estamos ante una pandemia, es decir, pan—demia. Está muy claro”.
Entre otras medidas, López Gatell habrá que reducir totalmente el consumo de pan: “En especial el pan de muerto, pues si lo que queremos es disminuir la mortalidad, ¿cómo vamos a andar comiendo pan de muerto?». Del mismo modo, anunció que todos los panes de muerto existentes serán incautados mañana en la mañana. “Se expropiará junto con el chocolate, porque, ¿qué es el pan de muerto sin el chocolatito caliente?”.
La medida está provocando compras de pánico y arremolinamiento en lo panteones. Las autoridades anticipan un rebrote de alcances espantosos debido a este reciente pandemonio.
Cuando se le preguntó al presidente Andrés Manuel López Obrador cuál era su opinión al respecto, se limitó a echarle la culpa al PAN.