Las últimas semanas han sido tensas tanto para la administración saliente como para la entrante, pues las caravanas de migrantes han provocado la movilización de los organismos asistenciales y de derechos humanos.
Es por ello que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha anunciado que se implementará un nuevo impuesto para todos los productos de la canasta básica en México.
“Es necesario cubrir las necesidades de los migrantes”, declaró José Antonio González Anaya, titular de la SHCP. “No será mucho, no se alarmen. Por ejemplo, la tortilla sólo subirá de 14 pesos a 36 pesos, pero eso es necesario a fin de cubrir las necesidades de las caravanas que lleguen al territorio nacional”.
El próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, declaró que el próximo gobierno deja en números rojos al país, pero “siendo nuestra obligación como latinoamericanos, satisfaremos las necesidades de nuestros paisanos, y un nuevo impuesto es la mejor solución”.
Con este nuevo impuesto, el gobierno federal se hará cargo de conseguir hoteles por el tiempo que guste cada refugiado, además de transporte por avión hacia la frontera. Se espera que alcance para las tres comidas diarias de rigor, por lo menos en Vips o en Toks.
El senado de la República decidirá en los próximos días si este impuesto, que fluctuará entre el 15% y el 75%, dependiendo del producto, subirá algunos puntos porcentuales más.
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