La vacunación contra covid-19 en México avanza de manera gradual, pero ya están comenzando a surgir los problemas, pues de acuerdo a un reciente estudio, un porcentaje considerable de la población no estaría dispuesta a dejarse vacunar, con pretextos que van desde que provoca efectos secundarios hasta que el chip 5G que contienen podría no ser compatible con todas las compañías de servicios telefónicos.
Es por ello que un grupo de estudiantes del Instituto Politécnico Nacional desarrolló la primera pistola de vacunas, la cual es capaz de disparar una minijeringa que puede penetrar casi cualquier tipo de ropa, administrando una dosis de manera eficiente, segura, y, sobre todo, sin necesidad de contar con el consentimiento de la persona.
El sistema se ha probado tanto en la presentación de pistola como de rifle. Pero también hay versión AK-47. De esta última, el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, señaló que sería la más efectiva para vacunar multitudes: “Sería ideal irrumpir en las fiestas que ilegalmente realiza la gente a pesar del semáforo rojo y ametrallar a todos. Pero como el presidente no lo permite, podríamos sólo vacunarlos”.
Hasta el momento todavía se analiza si el gobierno federal adquirirá las armas lanzavacunas o seguirá haciéndolo a la antigüita, es decir, con el arcaico método de uno por uno.