El Polítecnico vuelve a ser noticia, pues un grupo de estudiantes de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) Culhuacán logró desarrollar el primer sable láser completamente funcional, elaborado a base de piezas descartadas de un deshuesadero, papel aluminio y un celular Nokia descontinuado. Este descubrimiento fue presentado a la prensa en la lonchería «La Lupita», debido a que los estudiantes no pudieron encontrar ningún otro lugar que les facilitara las instalaciones.
Edelberto Ramírez, el director de este proyecto, nos dijo durante la conferencia de prensa: “Desde muy chavito, fui fan de las películas de La Guerra de las Galaxias, y consideraba que una herramienta de este tipo era algo perfectamente posible. Así las cosas, un grupo de compañeros y yo emprendimos el proyecto. El presupuesto que nos dio el IPN fue de 45 pesos, nos ajustamos a él y pudimos terminar el primer aparato”.
Los miembros de la prensa quedamos en la incredulidad total. ¿Cómo era posible tal cosa? Mientras todos murmuraban sin poder creer que eso fuera posible, este audaz reportero se adelantó a preguntar:
— ¿Y cómo le hicieron…? No, en serio, ¿cómo fue que pudieron conseguir un presupuesto tan alto para una investigación científica?
— Esa fue la parte más complicada, mi amigo. Pero fue cuestión de saber un poco de ingeniería.
— ¿Podría ser más específico?
— Por supuesto. Unos micrófonos ocultos en las oficinas de algunos de los directivos de la escuela, una inocente extorsión, y pronto conseguimos los cuarenta y cinco varos, algo que a muy pocos se les da.
— ¡Oh, brillante…! ¿Y qué piensan hacer ahora con su invento?
— Teníamos pensados varios usos, como por ejemplo, cortar césped, hacer esculturas de hielo o ensamblar semáforos frikis, pero Disney ya envió una orden judicial para que no se utilice en nada, so pena de demanda millonaria.