Nuevamente el luchador Octagón deja oir su voz. Pero ahora no se trata de ningún problema de derechos de autor; por el contrario, ahora se trata de un problema serio y que afecta la lucha libre nacional, sea dentro de una empresa o a nivel independiente.
«Es necesario que los luchadores, o bueno, los que se dicen luchadores, dignifiquen su trabajo, no es posible que sigan cobrando una torta y un refresco por arriesgar su vida sobre el ring, haciendo con esto que el único bolsillo que se agrande sea el de los promotores», fue lo que, de inicio, dijo Octagón a este reportero, pero ahí no terminó:
«Yo no creo que quien acepte una torta y un refreso deba llamarse luchador. Lo peor de todo, es que no se dan cuenta que esas acciones nos afectan a todos, y por eso no nos dan lo que merecemos»
— ¿Entonces hay que exigir un pago digno, señor Octagón?
— Pues sí. Uno quiere cobrar mínimo un pomo, aunque sea de Bacardí Blanco, y una botanita, pero por culpa de poquiteros, los promotores piensan que un refresquito es suficiente. Ya de menos que nos pongan un six de cerveza para agarrar valor y salir a rompernos la madre en el ring, pero ni eso… No se vale. Y la culpa es de los que no se dan su lugar, por ellos pagamos todos, o mas bien, no nos pagan a ninguno.
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