Un grupo de estudiantes del Instituto Politécnico Nacional sorprendieron a la opinión pública con su nuevo proyecto, que busca reutilizar el vómito humano como una fuente nutricional de bajo costo, misma que podría solucionar muchos problemas de subalimentación y desnutrición entre los ciudadanos de menores ingreso.
«Los alumnos están partiendo del hecho de que los alimentos que se vomitan no han llegado aún al proceso más completo de la digestión, por lo que una gran cantidad de los nutrientes aún están presentes”, declaró el profesor Espasmo Arcada, en entrevista con El Dizque.
El profesor Arcada explicó que en las primeras etapas de la digestión, las sustancias devueltas no sólo mantienen sus beneficios, sino que son más sencillas de asimilar por el nuevo organismo receptor.
“Obviamente, no se utiliza tal y como se recolecta, sino que es sujeto a un proceso donde se disminuye el nivel de ácidos y se le da una consistencia mucho más aceptable para el consumidor”.
— ¿Y en cuanto al sabor?
— No hay problema. De hecho, llevamos meses haciendo pruebas gracias al apoyo de empresas como Gamesa, Bimbo, Marinela y Sabritas, que han usado el vómito que industrializamos en el IPN como base para sus productos. Los consumidores han reconocido que el sabor de los productos ha mejorado.
— ¿No les da asco?
— No, porque no les decimos qué es, y si la gente no sabe qué está comiendo, no le hace el feo.
Nos retiramos de la entrevista tras rechazar amablemente los canapés que nos ofrecieron.